Seis saharauis describen al juez Ruz las torturas de los militares marroquíes


Seis saharauis han relatado hoy al juez Pablo Ruz las torturas y secuestros que sufrieron ellos y sus familiares a manos de militares marroquíes entre 1975 y 1976 y que, según ellos, tenían como objeto "exterminar y eliminar" al pueblo saharaui y "desplazarles forzosamente" del Sáhara Occidental.

Los seis -tres hombres y tres mujeres- han comparecido ante el juez de la Audiencia Nacional como testigos protegidos y cuatro han sido examinados por una médico forense para que quedara constancia de las secuelas de las torturas a las que fueron sometidos hace 36 años, según han informado fuentes jurídicas.

El abogado que les acompañaba, Manuel Ollé, ha explicado que la forense ha podido comprobar así "la especial perversidad en las torturas a las mujeres", ya que una de ellas presentaba quemaduras en todo su cuerpo fruto de las corrientes eléctricas que le fueron aplicadas en uno de los centros secretos de detención con los que, según han referido, contaba entonces Marruecos.

Para justificar la competencia de la Justicia española en esta causa, en la que se investiga a altos cargos del Gobierno marroquí por delitos de genocidio y torturas en el Sáhara Occidental, los testigos han aportado documentación que acredita sus vínculos con España como el DNI o el Libro de Familia español.

No obstante, al finalizar su declaración, y tras agradecer a la Justicia española que después de tantos años se haya decidido a investigar estos hechos, alguno ha lamentado la forma en que España les dejó abandonados cuando Franco cedió en 1975 el Sáhara Occidental a Marruecos y Mauritania.

Han asegurado además que la situación ocurrida en el Sáhara entre 1975 y 1976 permanece a día de hoy, ya que persiste, según su testimonio, "una vulneración sistemática de los derechos humanos".

Para Ollé, las declaraciones de estos testigos "han servido para reforzar las imputaciones" contra los trece altos cargos marroquíes contra los que se dirige la querella por delitos de genocidio y torturas en el Sáhara en relación con la desaparición de cientos de saharauis.

Los principales altos cargos investigados son Housni Ben Sliman, superior que ordenó y dirigió presuntamente la campaña de detenciones y posteriores desapariciones en Smara en 1976, y Abdelhafid Ben Hachem, presunto responsable de los secuestrados en 1987 en El Aaiún y supervisor de los interrogatorios bajo tortura.

En principio iban a prestar su testimonio ocho personas, pero finalmente no han podido viajar todos a España por problemas burocráticos, mientras que la activista saharaui Aminatu Haidar ya ha notificado al juez que mañana no podrá prestar su testimonio por encontrase hospitalizada en Las Palmas por un problema de garganta.

Mientras Ruz escuchaba el testimonio de estos seis saharauis, una veintena de compatriotas y simpatizantes con esta causa se concentraron ante las puertas de la Audiencia Nacional para apoyarles y protestar por la situación del pueblo saharaui.